martes, 8 de enero de 2013

De la División del Trabajo






En 1776 Adam Smith publicó su controversial libro ‘Una Investigación sobre la Naturaleza y Causas de la Riqueza de las Naciones’ y desde ese instante hubo un antes y un después sobre la forma de interpretar la relación del hombre con su entorno económico, social y político.

El propósito tanto del presente como de los futuros artículos a ser publicados es formular una visión de la realidad económica de Bolivia utilizando la Teoría Clásica de Smith plasmada en cada uno de los capítulos de su Riqueza de las Naciones.

En su Libro I, Capítulo I, de la división del trabajo se nos plantea algo elemental para entender toda la realidad económica y es el hecho de que las sociedades logran destrezas, pericias, adelantamientos productivos solamente a causa de la división del trabajo.

Si bien Bolivia ha dado pasos importantes en cuanto a la división del trabajo, especialmente en la etapa posterior al auge liberal iniciado en 1985, todavía se sigue concibiendo profesiones extremadamente generales que no permiten una mejor cualificación en los procesos de producción, ya que muchas destrezas específicas necesarias para la generación de bienes y servicios competitivos no son adecuadamente desarrolladas por los mismos.

Muchas veces se considera a la división del trabajo como algo extremadamente obvio y por lo tanto le revisten escasa consideración. Tanto el fordismo como el postfordismo basaron sus procesos de producción en los principios esgrimidos por Smith y estos a su vez permitieron la evolución de una industria automotriz en todas partes del mundo.

Cuando en Santa Cruz se visitan talleres, pequeñas manufacturas, negocios, organizaciones, etc., se observa la baja productividad debido fundamentalmente a una ineficiente división del trabajo, porque al interior de la organización no se tiene una visión sobre el impacto positivo que tiene en su desarrollo.

Una baja productividad implica una mayor absorción de costo de mano de obra directa, menores márgenes de utilidad, mayores precios, por lo tanto pérdida de competitividad ante productos de empresas con mayor incorporación de los principios de la división del trabajo.

Sin embargo, existen críticas a estos planeamientos smithsonianos ya que plantea que cuando ‘un hombre tiene puesta toda su atención en un objeto solo está en aptitud más propia para descubrir los medios más oportunos y expeditos para tocar en el punto deseado, que cuando su imaginación se disipa con la mucha variedad de materia’ lo que en realidad está proponiendo es la deshumanización del obrero.

La Riqueza de las Naciones no está exenta de planteamientos que hoy en día han sido superados por la realidad en la cual se vive durante el siglo XXI, pero también es cierto que los fundamentos de la división del trabajo permitió esgrimir las bases de lo que sería la Revolución Industrial, la Edad Moderna y Contemporánea que hoy nos toca vivir.

Hasta el próximo capítulo …

 

No hay comentarios: